domingo, 1 de noviembre de 2009

Los gitanos del Caprabo...

El grupo de investigación va tras la pista de unos comerciantes ilegales de carne… una carne utilizada para comida procesada en la que han detectado un ADN no identificado. Al llegar a los grandes almacenes se encuentran con lo inesperado, en la gran nave, atada con fuertes cadenas, una inmensa criatura gemía de dolor. Poco después descubrían que era una criatura alienígena que tenía la particularidad de poder regenerar sus tejidos a una velocidad considerable y que además crecía en el tiempo. “Entonces si funciona podríamos alimentar al mundo!” exclama exaltada Toshiko, uno de los protagónicos de la serie de ciencia ficción que me he bajado de Internet. Es precisamente esta frase de Toshiko lo que me ha motivado a escribir… está vez sobre los “gitanos del Caprabo”.

En los bajos de mi edificio hay un supermercado que pertenece a la cadena de supermercados de nombre Caprabo. Cada día, cerca de las 9 de la noche unos gitanos, en su mayoría mujeres, se acomodan en los bancos que están en la acera justo delante de la puerta. Siempre los he visto desde que vivo aquí, pero nunca me había preguntado el por qué de su presencia en los bajos de mi casa. Algunos gitanos son gente bastante rara y en general dan un poco de miedo por su aspecto sombrío. Un día descubrí sin querer el misterio: cerca de las 9 de la noche, justo antes de cerrar el supermercado, los encargados tiran a la basura bolsas llenas de comida que no podrán vender al día siguiente.

El fenómeno del despilfarro de alimentos a nivel mundial en los países consumistas no está cuantificado, pero solo un estimado de la comida que se tira en hogares Británicos anualmente está en el orden de los millones de toneladas… ni siquiera puedo imaginarme cuantas toneladas son tiradas diariamente en países Europeos. La ya costumbre consumista de las personas, hace que estas compren más de lo que van a utilizar y mucha gente también interpreta el cartelito de “consumir preferentemente antes de” como una fecha de caducidad. En el caso de los supermercados se trata de puro negocio, es más rentable para las empresas tirar la comida que no se vende para mantener precios competitivos.

Tengo entendido que existen los llamados Bancos de Alimentos que se dedican a recolectar alimentos y distribuirlos entre los más necesitados, pero aún así mucha gente muere de hambre.

Así, cuando le digo a mi compañera de piso “la comida no se tira!!” ella se ríe de mi y entiendo que es muy difícil ponerse en la piel de un gitano o de un niño africano, incluso a mi a veces me cuesta y despilfarro en cosas de las que luego me arrepiento. Es triste saber que la verdadera solución está en las manos de a los que precisamente les importa una mierda si hay más o menos comida en buen estado tirada a la basura.

No Toshiko, NO, no necesitamos un alien que se regenere para alimentar al mundo. Necesitamos que los terrícolas que tiene el poder dejen de pensar solo en su “raza” de “élite” y se dediquen a pensar en toda la raza humana. Al menos los gitanos del Caprabo en los bajos de mi casa aprovechan (humillándose) la comida que los dueños del super tiran a la basura.

El mago

3 comentarios:

  1. Muy interesante el post Igor, a la par de triste, porque como se tiene que ver la gente para llegar a esos extremos, es un claro ejemplo para remover conciencias. En fin como siempre un post interesante y solo queda felicitarte po el post.

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  2. Que orgullo tener un hijo como tu,es muy triste lo que haz escrito,pero es una realidad y ojala que algun dia estas cosas no sigan pasando en el mundo.

    mama

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  3. ay.. así va este mundo.. yo no sé cómo va a acabar esto..

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